Cuando hablamos de artritis reumatoide, lo primero que suele venir a la mente son las articulaciones inflamadas, la rigidez por las mañanas, el cansancio que parece no terminar nunca.
Pero… ¿y si te dijera que tu cuerpo también tiene un mecanismo silencioso, invisible en las radiografías, que puede marcar una diferencia real en tu dolor, tu inflamación e incluso en tu descanso?
Ese mecanismo tiene nombre: nervio vago.
Y aunque rara vez se hable de él en las consultas tradicionales, en realidad es uno de los aliados más potentes que tenemos para modular la inflamación desde dentro.
No estamos hablando de magia, sino de comprender cómo funciona tu organismo como un sistema completo.
👉 Tu cuerpo no está roto.
Está buscando adaptarse. A veces lo hace con estrategias que no nos ayudan, pero siempre con una lógica interna.
La artritis reumatoide no afecta solo a las articulaciones: es una condición que impacta en la comunicación entre tu sistema nervioso, tu sistema inmune y tu sistema endocrino.
Y justo ahí entra el nervio vago: esa autopista silenciosa que conecta todos esos mundos.
¿Qué función tiene el nervio vago?
Podemos imaginarlo como un puente entre lo que sientes, lo que piensas y lo que tu cuerpo expresa. Cuando funciona de manera equilibrada:
- Reduce la inflamación.
- Calma la respuesta del sistema inmune.
- Mejora la digestión, el sueño y el ritmo cardíaco.
- Modula el dolor antes de que llegue a tu conciencia.
No se trata de “encenderlo” como quien aprieta un interruptor.
Se trata de aprender a modularlo poco a poco, para que vuelva a cumplir su función de manera armoniosa.
¿Qué tiene que ver esto con la artritis reumatoide?
Muchísimo.
En esta enfermedad, el sistema inmune actúa como si hubiera una amenaza constante, incluso cuando no la hay.
Esa sobreactivación provoca inflamación crónica, daña tejidos sanos y da lugar a los síntomas más conocidos: dolor persistente, rigidez matutina, fatiga intensa, hinchazón articular…
Aquí es donde aparece el reflejo inflamatorio, una función clave del nervio vago que puede reducir la producción de citoquinas proinflamatorias.
En palabras simples: ayuda a frenar esa respuesta inmunitaria exagerada… sin necesidad de añadir más fármacos.
No es magia.
Es biología aplicada con conciencia.

Modulación vagal: una puerta abierta al alivio
Regular tu nervio vago no sustituye tu tratamiento médico, pero sí puede potenciarlo y transformarlo.
Cuando tu sistema nervioso está en coherencia, el cuerpo entero responde mejor.
Y eso se nota en cosas muy concretas:
- Menos dolor.
- Menos fatiga.
- Mejor calidad de sueño.
- Mayor capacidad para moverte sin miedo.
- Más claridad mental para tomar decisiones.
Y lo mejor es que no hacen falta dispositivos caros ni técnicas complicadas. Se trata de volver a lo esencial:
🌀 Respiración lenta y profunda.
🌀 Movimiento suave y consciente.
🌀 Pausas reales a lo largo del día.
🌀 Rituales que te devuelvan seguridad interna.
🌀 Relaciones en las que puedas ser tú, sin disfraces.
Estimulación Auricular: otra herramienta en el cuidado integral
Además de la respiración, el movimiento y las pausas conscientes, la estimulación auricular se está investigando como un complemento prometedor para personas con artritis reumatoide.
El pabellón de la oreja está lleno de terminaciones nerviosas, entre ellas del nervio vago, trigémino y occipital menor. Esto lo convierte en una zona estratégica para activar vías que modulan tanto la inflamación como el dolor en todo el cuerpo.
¿Cómo funciona?
- Al estimular ciertas áreas de la oreja se activan centros cerebrales que regulan la inflamación y la percepción del dolor.
- Estudios clínicos muestran reducciones en marcadores inflamatorios como TNF-α, IL-6 e IL-1β, junto con mejoras en el dolor articular y la movilidad.
- Los beneficios no solo se sienten en las articulaciones: también en el bienestar general, la energía y la libertad de movimiento.
Técnicas utilizadas:
- Estimulación eléctrica transcutánea del nervio vago.
- Acupuntura auricular.
- Estimulación mecánica de la concha auricular.
En otras palabras, la oreja puede convertirse en un aliado estratégico para apoyar al nervio vago en su función antiinflamatoria, aportando un enfoque complementario, seguro y con respaldo científico.
Un mensaje importante para ti
Tu cuerpo no te está traicionando.
Te está pidiendo que lo escuches de una manera nueva.
Cuando trabajamos juntas/os no miramos solo tus articulaciones:
✔️ Observamos tus ritmos.
✔️ Tu historia.
✔️ Tu sistema nervioso.
✔️ Y la forma en la que lidias con lo invisible.
No se trata de fórmulas mágicas.
Se trata de acompañar procesos reales, donde cada práctica, cada conversación y cada ajuste tienen un sentido clínico y emocional.
¿Y ahora?
Si llevas tiempo sintiendo que “algo más tiene que haber”…
Si tu cuerpo pide respuestas más allá de la etiqueta de “artritis”…
Si quieres aprender a regular tu sistema nervioso desde dentro…
Con un enfoque clínico, humano e integrador.
🔹 Solicita tu primera consulta aquí y empecemos a devolverle a tu cuerpo su música original.
Porque cuando el nervio vago se afina…
el dolor baja el volumen,
y tú recuperas el ritmo de tu vida.







